22.11.11

CRONOS/REA...

[Xentileza da Merce pra ilustrar ista páxina. É dun luar fermoso e antergo, coma a sutileza da mesma. Con ista daguerrre trátase de presentar o luar sosegado qué é a Terra mais o ceo nas noites cheas de romantismo]

¿Y el Universo hacia dónde se expande?
PLANTEAMIENTO:
El Universo no  sólo  se expande, se expanden los “objetos” que lo pueblan dentro de él. Son las galaxias, los cúmulos, las superagrupaciones, las que se expanden con todo el conjunto de ellas y de objetos (astros) a su vez.
¿Por lo tanto se desplaza en expansión el conjunto “conocido” cómo Universo? Sí. ¿Hacia dónde se desplaza? Muchas teorías coinciden en que esa expansión se produce en todas direcciones sin diferencia de dimensión, cómo vagando en el frío y distante (para nosotros que somos tan diminutos o más que un microbio comparados con sus enormes distancias medidas en tiempo/velocidad que ya ni en parsecs) espacio de expansión. Tal aseveración suena a redundancia y nos deja un seco e inútil argumento que no nos conduce a nada; por eso podríamos decir que las teorías más audaces (la mía) es que la pregunta se responde de otra forma.
[Gentileza de Dani Caxete para ilustar esta página por su efectismo explosivo para representar la energía cósmica transformadora. El universo profundo actual]

¿Hacia dónde se expande el Universo?
 Antes hablamos de la expansión de sus objetos dentro de la propia dimensión que debería ocupar el Universo. Ahora deberíamos dar la vuelta al concepto que tenemos del tiempo como una sucesión de la medida cronológica que respecto de una circunstancia anterior y de una futura respecto del presente que ocupamos nos planteamos todos los días. Esos sucesos acaecidos ya no existen pero perduran en nuestra memoria cómo un suceso ocurrido y del cual ya hemos obtenido un resultado que nos prepara para el futuro, futuro que aún no existe pero que se nos plantea tan irreal y distante si nuestra pretensión sobre él es ver en muchos días por delante; en cambio ese futuro es casi casi un presente si lo planteamos inmediato, tanto que enseguida se convierte en presente. Bien, pues teniendo grosso modo este pequeño planteamiento podrías, ahora sí, imaginar que si ese Universo, en el cual vivimos, con sus objetos no se expande (pues si sus objetos se expanden no pueden alcanzar un límite y allí colisionar entre sí en un enjambre desastroso que los condujese a una nueva Big-Crunch que no está motivada por nada necesario) en ninguna “DISTANCIA” por ti conocida, sólo nos quedaría pensar que este Universo Se EXPANDE en el TIEMPO. Su expansión se está produciendo en El TIEMPO y a su vez va ocupando un espacio. Pudiera parecer sencillo pero es algo, no tanto, más complejo de lo que parece. La expansión en el tiempo es el que crea el espacio. Donde unos objetos van desapareciendo y otros se van creando en la misma medida en que sus sustancias se van deshaciendo para viajar salvando enormes distancias y volver a formas jóvenes “células” de astros que configurarán su nuevo aspecto. Cómo recordarás, hablábamos hace un instante de unos hechos acaecidos en una situación, la cual respecto del presente llamamos pasado y la cual respecto de lo que imaginamos nos ocurrirá, llamamos pasado o futuro. Pero cómo ya planteó Heráclito, ya nada es igual, pues tanto, el mismo tiempo que transcurre como el lugar y nosotros mismos no estamos en clara quietud sino en lento movimiento; por lo tanto nuestras células también habrán superado esa transición de esos instantes y serán cada vez un poco más diferentes o más viejas...
[Concepto artístico del autor sobre la sucesión de posibles universos simultáneos, contenidos en sí mismos, siendo a su vez continentes]
En el Universo su expansión como conjunto se produce dentro del tiempo y a su vez creando espacio. ¿Pero qué espacio y dónde se produce ése? Tal vez una de las teorías nos hable de un “movimiento” de expansión dentro de un Universo Mayor; otras nos hablan de Multiversos, algo nada descabellado; y otras hablan de un conjunto de pequeños universos que se van creando y destruyendo en función de la medida en que sus objetos alcanzan una determinada vejez y ya no pudiendo rehacerse más veces entre sí son implosionados y/o engullidos para dar lugar a un nuevo/s universo que se vuelve a engendrar dentro de ese Tiempo, pues el espacio que ocupaban ya no existe.
No voy a entrar en la definición del tiempo que de ella han dado científicos cómo Einstein o de otros muchos que unas veces como científicos y otras como filósofos y/o pensadores han postulado sobre el tiempo.(tengamos en cuenta que el tiempo es imparable, no se puede parar, es inmutable e irreversible, tal y como nosotros lo conocemos) Es interesante saber, debes saber, que una cosa es tu /nuestra medida del tiempo y nuestra dimensión tan finita y contingente que comparados con la medida del tiempo de los grandes objetos espaciales es ínfima e insostenible, ni siquiera un suspiro, empleando una leve metáfora. Bien, pues ellas también tienen un tiempo de duración pero es tan inmenso que se nos escapa al razonamiento que empleamos aquí; entonces deberías imaginar que hay un Tiempo mayor que se crean y es, por así decirlo, simultáneo a esa expansión. Creado ese tiempo (el cual es existente en sí mismo) sobreviene el espacio para que sus objetos continúen en expansión. El problema es saber a dónde conduce ese final, si es que hay un final. El final tal y cómo nosotros lo entendemos no es ni debe ser así. Su final es tan distante y tan lejano (tanto en tiempo como en espacio) que nos conduce a plantearnos nuevas aproximaciones nada descabelladas sobre esa expansión.
Pero eso es un tema que dejaré para un posible planteamiento posterior, replantearlas por quién quiera para que la explicación sea más clara si no lo hubiese sido ya.
Breves saludos.



Tampoco pretendo hacer una tesina de todo esto y por ello mis palabras están algo ligeras de conceptos y se plantean, o eso intento, de forma filosófico frugal. Por ello es posible.
Deica logo amicus.




[Esta entrada ya se había planteado en otros blogs con fechas de 2009, 2010, 2011]