19.1.15

Conjunción Saturno-Luna y Sol- Venus...Mariblanca II

Albedo lunar seduciendo a  Saturno...y a mí también.


Vangelis: Albedo 0.39 Alpha

[Eiquí en galaico]
Debieron pensar los que primitivamente imaginaron los dioses que algún día se confirmarían sus pensamientos esquizoides y esperando nos dirían cuánto deseaban contarnos que su infierno existe aunque sus antepasados con mitras y casullas se equivocaron donde en un principio lo ubicaron. Desde entonces enfermaron, y eso se contagia si no hay remedio o antídoto. Se propaga como la propaganda, validado pleonasmo, de los anuncios de lo que no pareciendo bueno lo sea por tradición, costumbre o falacia múltiple. Meterlo por los ojos es primordial, luego el tiempo ya dirá.
Debieron pensar o piensan los que hoy preceden que ahora se podría escudriñar un lugar mejor para tan inalcanzables entes a los que adoran y desean que a la fuerza, o sin ella, los demás también los adoren por encima de todo; pues no desean ni permiten que, aunque toleren a regañadientes que los estados nos protejan, el libre albedrío nos permita someter la voluntad a la razón y viaje a sus olímpicos aposentos tras el puente de la valhalla acercarnos a ellos con telescopios y otros instrumentos para ver (para (no) creer) que nada hay más allá ni tras el inicio; cuando lo de aquella gran ºexplosión genuina.
Cómo dijo una tarde un *amigo, empecemos por el principio. Es más original y genuino.
Somos química, amigo, ( y agua :)))´ dijeron en el anuncio de bruce lee) somos producto de esa energía y cuando se nos acabe a mí me depositas a extramuros de cualquier camposanto, en lugar más que neutro, al margen de casullas, albas, estolas, religiones y de otros paganismos, para saludar a las comitivas nuevas y recordar a propios y extraños que entre llantos plañideros me vea envuelto, empático y deje que por mi garganta descienda el sabor amargo de la melancolía y la ausencia...de otros.
Deposíteme, no me incineren, en una aldea alejada de luces y alumbrados, fuera de sus muros, si los hubiere, para no entrar en sinrazones varias y me tomen por crédulo. Nada más antes de entrar, donde crezcan malvas reales y de las otras...locas o vulgares...pero largas, hermosas. Donde aunque me pisen soporte con humor cada huella desconocida; pues sólo deseo ver, despertando cada noche, las estrellas que hay arriba y me lleguen noticias de nuevos descubrimientos que otros hombres eruditos, no como yo, descubren cada día para asombro de todos.
Y pese a quien pese que tras el principio inicial, como ya dijo el susodicho amigo, no se esconde ni hay E/ente alguno que posea en sus manos capacidad de engendrar semejantes desencadenantes pues lo que es imaginado y, además, fuera real, sólo por el hecho de serlo ya sería medible y para nada mejor que todo lo que podemos ver tras las lentes de telescopios cada vez más potentes.
Son poderosas sinrazones las que los mueven a acaparar éticas y otras normas con las que mantener su poder y decidir por todos lo que unos pueden hacer y otros no; claro que en ellos no reza tal máxima y haciendo de sus capas sayos burlan sus tentaciones o vicios con confesiones altísimas y propósitos de enmiendas que aunque no sea verdad ellos erre que erre por si algún día tras todas esas estrellas o a través de centros o agujeros negros, incluso materia oscura, descubren que aún les queda esperanza, la que nunca se pierde, donde hallar a la tan filosofal piedra de sus esquizofrenias autocomendadoras.
Descubrir el profundo campo galáctico es como, tumbado boca arriba, apreciar el enredoso aroma de lo real del pasado lejano.
Incierto futuro que se forma con cada consecuencia nuestra y que desde aquel periplo africano cada día somos más hijos de las estrellas a las que regresamos imaginativamente en vida o al morir, hechos polvo.
A mí, si se puede, déjenme, para no molestar con charlas y rollos a los otros que descansan, fuera...Donde mi libre albedrío razone cada noche lo que fui aprendiendo.
Déjenme ante la tapia por si sacando unos botes me da por hacer un grafiti
Fascinante lugar ese núcleo por encima de Orión, alrededores incluidos. Ya me gustaría dar un garbeo, en moto, por él. d:D´


Privilegios reales, privilegios de bronce a caballo y del  pedestal presidiendo la plaza a la vista. Ésta es la original.


ºBig.Bang
*O yo mismo.